Opinión

Socios de Petrocaribe en alerta por crisis de Venezuela

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Uno de los programas emblemáticos del fallecido ex presidente Hugo Chávez en su sueño de exportar la llamada “revolución bolivariana” fue Petrocaribe, que desde hace casi una década entrega petróleo en condiciones preferenciales a una serie de pequeños países del Caribe y Centroamérica aún más pobres que Venezuela.
Esa iniciativa ha sido duramente cuestionada por la oposición política local, que reclama “la regaladera” de petróleo teóricamente orientada a comprar apoyos internacionales, mientras en el país las calles están oscuras por falta de alumbrado público, los hospitales colapsan, y nuestra propia deuda externa sube como la espuma en un vaso de cerveza.
Hoy, cuando la dura crisis económica es una verdad “del tamaño de la luna llena” especialistas dentro y fuera del país comienzan a preguntarse si será posible mantener en el largo plazo este programa que ha beneficiado, pero también endeudado a nuestros protegidos.
Valga la oportunidad para insistir en que bajo el modelo de Petrocaribe, Pdvsa no “regala” nuestro petróleo, pero sí lo vende muy barato y con plazos de pago de 25 años y tasas de interés de entre 1% y 2% anual. Además lo intercambia por alimentos como caraotas, arroz y carne que bien podrían producirse en nuestros propios campos.
“El porcentaje de pagos diferidos sube con el precio del petróleo”, manteniendo el costo inmediato del barril en alrededor de $40, cerca de la mitad del precio corriente del mercado, observó esta semana un estudio del banco internacional Scotibank.
Bajo los acuerdos con sus aliados, Venezuela “vende petróleo a precios de mercado, pero concede generosas condiciones financieras a los países beneficiarios, incluyendo préstamos de largo plazo a bajas tasas de interés y algunas veces la posibilidad de pagar en especies”, observa por su parte del Fondo Monetario Internacional, FMI.
“Muchos países en América Central y el Caribe importan petróleo desde Venezuela bajo condiciones favorables de financiamiento, a través de varios acuerdos de cooperación. Algunos de esos países se han convertido en altamente dependientes (a ese suministro) y en consecuencia están expuestos a shocks originados en Venezuela que pueden llevar a la cancelación o endurecimiento de las condiciones de esos acuerdos”, señaló el Fondo.
Este organismo analizó los riesgos de que algunos problemas de grandes y pequeñas economías se propaguen a otros países y regiones. Por ejemplo, un menor crecimiento de la economía de China termina afectando la demanda en productos básicos y materias primas, lo que baja los precios del petróleo y afecta a países como Venezuela.
Eso significa para nosotros menos carne y arroz importada en los supermercados. Para otros, podrían significar menos gastos en combustibles.

En Venezuela era la cosa
El volumen de petróleo vendido bajo los diferentes acuerdos (San José, Caracas, de Cooperación Integral y PetroCaribe) se ha estabilizado en alrededor de 250.000 barriles por día después de 2009, con una factura que sumó cerca de $10.000 millones en el 2012, calcula el FMI.
Esos acuerdos representan relativamente una pequeña proporción del sector petrolero venezolano, no obstante, las autoridades podrían decidir reducir este respaldo, obligadas por las limitaciones de recursos financieros que vienen de afuera.
Los acuerdos equivalen a solamente 5% de los ingresos por exportaciones de Venezuela (unos $4.900 millones) y al 2,7% de toda la suma de riqueza que producimos en un año.
En vista de la falta de dinero en efectivo en divisas que sufre Venezuela, incluyendo una continuada caída de las reservas internacionales, las autoridades podrían decidir reducir o eliminar estos programas, o en todo caso modificarlo por condiciones financieras menos generosas, señalan los técnicos del FMI.
En todo caso, ya ocho países han reportado algunas reducciones en el financiamiento de Petrocaribe desde 2013.
“Algunos países son altamente dependientes del financiamiento de esos acuerdos” y reciben de Venezuela el equivalente en promedio al 1,5% de toda la suma de bienes y servicios que producen en un año.
Pero en algunos casos esa dependencia se eleva a entre 3% y 7%.
Algunos aliados le deben a Venezuela 10 de cada 100 dólares que producen en un año y en el caso de Haití y Nicaragua, la suma se eleva a 15 y 19 dólares, respectivamente.
En caso de una interrupción de los acuerdos, o un cambio abrupto en sus condiciones, muchos de ellos podrían enfrentar una significativa brecha financiera con el exterior y serias dificultades macroeconómicas.
Entonces podrían enfrentar una difícil decisión entre ajustarse y encontrar fuentes alternativas de financiamiento, incluyendo el FMI.
En vista de esta vulnerabilidad algunos beneficiarios del petróleo venezolano ya están haciendo planes de contingencia. Por ejemplo Guyana ha estado ahorrando una parte muy importante del financiamiento de PetroCaribe para usarlo como “fondo salvavidas”, mientras está reduciendo activamente su deuda con Pdvsa.
Jamaica planifica fortalecer sus reservas internacionales en el mediano plazo como un alivio parcial a sus riesgos en la balanza de pagos. Belice usará el financiamiento de Petrocaribe para fortalecer sus coberturas de riesgo externo. En Haití, las autoridades están fortaleciendo sus políticas fiscales y monetarias como amortiguadores, en forma de reservas internacionales y depósitos en el sistema bancario, explica el FMI.
En su informe para clientes, el Scotiabank coincide en que factores políticos y de fondo afectan la longevidad de PetroCaribe, y podrían conducir a una eventual disolución de la unión energética.
“El acuerdo ha llevado a una creciente dependencia fiscal respecto a Venezuela entre los miembros y ha perpetuado patrones de consumo que son insostenibles en la actual era de altos precios del petróleo”, señaló el banco.
Los más vulnerables son Haití, que se abastece en casi 100% del petróleo de PetroCaribe; Nicaragua (más del 60%) y Guyana y Jamaica (cerca de 40%).
RECUADRO:
Los 13 beneficiaros activos de PetroCaribe son:
Antigua y Barbuda
Belice
Dominica
República Dominicana
El Salvador
Grenada
Guyana
Haiti
Jamaica
Nicaragua
Saint Kitts and Nevis
San Vicente y las Granadinas
Suriname
34%
de todo el consumo
de petróleo de esos países viene de PetroCaribe

$11.000
Millones era la deuda acumulada de esos países con Venezuela
en petróleo barato al cierre de 2013
Eso equivale a 16% de la deuda total de esos países
Y a 8% de todo lo que producen sus economías en un año.
(Funte: Scotiabank Economics)

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