El Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), en el gobierno, ratificó ese lunes "por aclamación" al presidente del país petrolero, Nicolás Maduro, como máximo responsable de la agrupación durante una sesión de trabajo de su IV congreso que se vio interrumpida por un corte eléctrico.
Maduro fue «designado y ratificado como presidente del PUSV» después de «una decisión de carácter extraordinario» de las bases de la formación, dijo el primer vicepresidente del partido, Diosdado Cabello.
La medida dotó a Maduro, además, de «todas las facultades, poderes y autoridad necesaria para que tome las decisiones en el sentido de nombrar (la) dirección nacional» del PSUV, así como cualquier otra «en materia organizativa» que «sea necesaria para el fortalecimiento del partido y de la revolución».
«Que garantice que estos 4 años, que son de dura guerra contra nuestro pueblo, el PSUV esté a la altura de la circunstancia», añadió Cabello.
Posteriormente, Nicolás Maduro ratificó este 30 de julio como primer vicepresidente de la tolda roja a Diosdado Cabello, así como a Eduardo Piñate en la secretaría del Partido.
A su llegada, el jefe de Estado achacó a un «sabotaje» el corte eléctrico, al tiempo que agradeció su ratificación como líder del «partido de Chávez».
«Les agradezco la lealtad (…), cuenten con mi compromiso absoluto y máximo para entregarlo todos los días», señaló.
Aprovechó para solicitar a los presentes a aceptar las propuestas económicas que elevó a la ANC, como lo es la reforma de la Ley de Ilícitos Cambiarios.
Por otra parte, Maduro no ratificó en sus puestos a todos los que participan en la dirección nacional del PSUV sino que pidió a las 12 mesas de trabajo que preparen una lista de 50 nombres de líderes -hombres y mujeres- «que pudieran conformar la dirección nacional, las vicepresidencias y los que asuman el Consejo Político Consultivo.]]>
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