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Lacalle no quiere dictadores en su toma de posesión

Los gobernantes de Venezuela, Cuba y Nicaragua no seràn invitados al acto de investidura del nuevo presidente uruguayo.

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Lacalle

Se evidencia un claro giro en la política exterior que tendrá Uruguay con el nuevo gobierno que encabezará Luis Lacalle.

Los gobernantes de Venezuela, Cuba y Nicaragua no fueron sido invitados a la toma de posesión del nuevo presidente uruguayo. Es un anticipo de lo que será el giro en la política exterior de este país sudamericano, tras 15 años de gobierno del centroizquierdista Frente Amplio.

El sábado 15 de este mes, Lacalle confirmó lo que se había adelantado dos semanas antes. Fue su decisión personal no invitar a los regímenes a la toma de posesión, prevista para el 1º de marzo.

Lacalle aclaró que la decisión no implicará que se rompan las relaciones comerciales o diplomáticas, que a su juicio deben mantenerse con todas las naciones, en beneficio de Uruguay.

“Uruguay mantiene relaciones diplomáticas y comerciales con muchas naciones y estados. Eso no significa que se invite o no se invite a determinados mandatarios”, sostuvo elmandatario electo en la ceremonia de toma de posesión de diputados y senadores para el período 2020-2025.

“En campaña electoral de esta vez y en la anterior (2014) sugerimos hacer un tratado de libre comercio con Cuba”, sostuvo Lacalle para defender su punto de vista. Por un lado, dejar en claro el rechazo al carácter autoritario de ciertos gobiernos, pero estar abiertos al intercambio comercial.

“Una cosa no quita la otra. Que uno tenga relaciones comerciales por el interés nacional es distinto a valorar que se violenten y violen los derechos humanos, entre otros países, en Venezuela”, enfatizó.

Lacalle dijo no estar «dispuesto a que en nuestra asunción esté el dictador Maduro. Es una decisión personal, de la cual me hago cargo. Esto no es Cancillería, esto no es protocolo, esta es mi persona, que tomó esta decisión”.

El excandidato presidencial Ernesto Talvi, quien será el canciller del gobierno de Lacalle, sostuvo que las invitaciones para que haya delegaciones de alto nivel en la toma de posesión se cursarían o no conforme al primer artículo de la Carta Democrática Interamericana, según la cual “los pueblos de América Latina tienen derecho a la democracia”.

Talvi también anticipó que el nuevo gobierno uruguayo reconocerá como “presidente legítimo” de Venezuela a Juan Guaidó. Sin embargo, también tiene resuelto no aceptar a un eventual embajador nombrado por Guaidó, como sí lo hicieron otros países de la región.

El ex presidente uruguayo y ahora senador Pepe Mujica, por su parte, cuestionó la decisión de Lacalle de no invitar a los gobernantes de Cuba, Nicaragua y Venezuela. “Es un error muy fuerte porque están cayendo en lo que nos criticaban a nosotros, están haciendo discriminación ideológica”, aseveró.

Resulta simbólico que el contrapeso que tendrá Lacalle, desde el Frente Amplio, lo vaya a encabezar Mujica, una suerte de oráculo consultado por los periodistas sobre lo humano y lo divino, y quien suele tener opiniones extravagantes.

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