Internacionales

El muro que separa a Estados Unidos y México no está sólo en el mundo

En el planeta existen aproximadamente 65 barreras divisorias, bien sea muros, cercas, o alambradas, creadas por los gobiernos para obstaculizar las amenazas que acechan a sus naciones

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TEXTO: MANUEL TOVAR | FOTOGRAFÍA: Khalil Hamra | AP

Una barrera física, construida con madera, tierra apisonada, piedras y ladrillos se fue uniendo hasta convertirse en una serie de fortificaciones que servían como protección de las hordas nómadas que amenazaban e invadían las ciudades estado, que posteriormente se convertirían en el imperio chino. La edificación fue la respuesta que dieron los gobernantes en el siglo VII antes de Cristo, y posteriormente el primer emperador de China en el siglo I A.C , Qin Shi Huang, a las amenazas extranjeras.

28 siglos después la humanidad sigue lidiando con sus temores de la misma forma, bloquear aquello que es distinto a lo conocido y esperar que no irrumpa y cambie la sociedad existente. En la actualidad el tema ha tomado relevancia con la promesa de campaña del presidente de Estados Unidos Donald Trump.

El mandatario siguió el camino trazado por los chinos, aunque en este caso -y en sus palabras- el muro serviría para impedir la inmigración ilegal, tráfico de drogas y sobre todo defender al país de los “bad hombres”, como llama a los criminales que afirma llegan desde Centroamérica.

La valla parcial existente, que pretende completar Trump, en la frontera entre Estados Unidos y México no es la única construida para separar naciones o territorios. De hecho en el mundo se ha visto un repunte de estas edificaciones. Bien sea en la lucha contra el narcotráfico, la inmigración ilegal o el terrorismo, el planeta es hoy un lugar con más muros que hace tres décadas, cuando en 1989 cayó la icónica separación que dividía a Alemania y era el símbolo físico de la Guerra Fría.

Muchos de esos muros han sido respuesta directa al miedo que causaron los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001. Hasta ese momento no habían más de 20 de estos en el mundo. Hoy, en cambio, existen en el planeta aproximadamente 65 barreras divisorias, bien sea muros, cercas, o alambradas que, según los gobiernos de esas naciones, sirven de obstáculo a las amenazas que acechan a las naciones.

Planeta amurallado

Cuatro de los cinco continentes del orbe tienen naciones que establecen sus límites territoriales con barreras. Sólo Oceanía – y por supuesto los polos- son las únicas excepciones. Se mantienen sin edificaciones que bloqueen el libre tránsito. Claro está, muchos de los países son insulares por lo que el mismo océano es una barrera natural.

Asia es el continente que tiene más muros con 31. Muchos de ellos son muy antiguos como el de China y Macao levantado en 1870. Otros no tienen dos siglos, pero también cuentan décadas, como el de la zona desmilitarizada entre Corea del Norte y Corea del Sur finalizado en 1977 y el de India Pakistán levantado en 1990.

En Asia los conflictos territoriales y el terrorismo han sido los principales motivos para construir estas divisiones. Algunos países buscaron impedir que grupos irregulares perpetraran atentados en las naciones, tal es el caso de Arabia Saudita con Yemen o Jordania con Irak y Siria donde se erigieron estas barreras para evitar que elementos radicales amenacen el reino.

Europa es el continente donde se ha visto un mayor número de construcciones en esta década, en especial por el fenómeno de los refugiados que huyen de los conflictos armados y la pobreza y el hambre en Asia y África. 17 naciones principalmente en la zona de los Balcanes han creado barreras para evitar que miles de personas atraviesen su territorio y alcancen el tan ansiado espacio Schengen de libre tránsito.

El viejo continente es de los que más ha sido marcado por fronteras físicas y obstáculos después de años de apertura y prácticamente límites inexistentes. También la amenaza expansionista de Rusia llevó a que Lituania y Ucrania buscaran crear más «distancia» entre ellos y la nación de Vladimir Putin.

De África a América Latina

En África hay 14 naciones con muros de separación. Las verjas fueron erigidas para evitar que la guerra que ocurría se expandiese a otros territorios. Angola tuvo una guerra civil y la Suráfrica del apartheid buscaba evitar que Namibia se independizase o fuera controlada por la Angola comunista, por lo que se protegió con cercas.

Otro de los casos conocidos fueron los muros levantados por el reino de Marruecos ante el territorio de la República Árabe Sarahui -antigua provincia del Sahara español- que se independizó de Madrid, pero acto seguido fue atacada por Mauritania y Marruecos que se arrebató el territorio y aún no lo devuelve. El reino marroquí no sólo ha impedido a la república sarahui acceder a su soberanía como nación independiente, por su lobby ante el Consejo de Seguridad de la ONU, sino que no puede disfrutar a plenitud de su territorio por que Rabat niega sus reivindicaciones territoriales y lo bloquea con por lo menos ocho muros que aseguran es para la defensa ante las actividades del Frente Polisario.

Muchas de estas edificaciones están acompañados de militares, búnkeres, artillería, alambradas, alarmas, minas y radares que son para evitar que los sarahuis, en especial los refugiados, puedan volver al territorio que los marroquíes le arrebataron hace décadas.
América es el continente con menos murallas.

Tiene tres, aunque el número aumentará próximamente puesto que se plantea construir una cuarta división entre Argentina y Paraguay y otra está proyectada entre Belice y Guatemala. Principalmente su edificación corresponde al narcotráfico y en menor grado a la inmigración ilegal.

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