Director del Hospital de San Cristóbal: "Sin material de protección no se atiende al paciente. Y punto"

En una reunión de hoy lunes 13 de julio entre el director y el personal de Enfermería del Hospital Central de San Cristóbal, en el estado Táchira fronterizo con Colombia, se acordó que, más allá del deber y la responsabilidad que se tiene de salvar vidas, debe prevalecer el instinto de supervivencia.

“No voy a permitir que ustedes (los enfermeros) atiendan un paciente y se arriesguen. No lo atiendan, no lo atiendan, no lo atiendan”, fueron las recomendaciones del director del centro hospitalario, Leonardo Contreras, durante el encuentro.

Si el paciente se encuentra en terapia intensiva y el personal de salud no tiene material de protección «no lo atienda y punto», dijo Contreras.

«Ya ustedes argumentarán que no tienen tapabocas. Lo harán con argumentos válidos con quien les corresponda hablar. Igual yo lo diré: había esto y no había esto. No había N95 (tapabocas de alta eficiencia) y no se pudo atender. Y falleció el señor”, agregó el director del centro hospitalario.

La escasez de insumos básicos alcanza entre 70 y 90 % en los llamados hospitales «centinela» para el coronavirus. Esos son los centros de atención médica que, se supone, el gobierno de Maduro habilitó para pacientes con covid-19.

Los audios de la reunión

En audios que llegaron a la redacción de El Estímulo, provenientes de una fuente hospitalaria, se escuchó al director decir que comprende la situación que atraviesa el personal de salud porque “todos estamos del mismo lado. Soy médico y tenemos la misma responsabilidad”.

Agregó que no hay ni presupuesto ni dinero para comprar los insumos que se requieren.

El director del hospital de San Cristóbal aseguró que ha intentado conseguir los insumos, solicitándolos al gobierno nacional y al regional, pero aún no han sido entregados. «Y si no llegan no se atiende y punto”, indicó.

Al contrario, si el despacho de insumos se regulariza y se dota al hospital del material necesario están en la obligación de atender a los pacientes, destacó.

“El personal no se va a exponer sino tiene el material sanitario adecuado. Se lo dije a los médicos. En eso estamos claros”.

El personal de enfermería pidió a la dirección hospitalaria que la orden de no atender pacientes por no existir material de bioseguridad sea avalada en un documento. La respuesta fue que, al momento de redactar la historia clínica, se debe indicar que el paciente no fue atendido porque no se cuenta con el material de bioseguridad para realizar el procedimiento a casos positivos de coronavirus.

Reconoce el esfuerzo

El director del hospital reconoció la labor y el sentido de humanidad del personal de enfermería, a pesar de la preocupación que manifiestan por el aumento de contagios en la región fronteriza con Colombia y la mínima protección que poseen.

“Veo al personal trabajando con material (tapabocas y gorros) de tela. No sé cómo lo consiguen, si se lo regalan o no. Lo que sé es que hay mucho compromiso”.

Ante el inesperado giro que ha dado la situación de la pandemia en la región, la dirección decidió realizar algunos cambios, entre ellos redistribuir el recurso humano hacía el área de covid-19, aislada del resto.

“No vamos a abarcar más de lo que podemos. No somos robots, ni extraterrestres. Si se queda solo un enfermero en área de críticos pues solo se atenderán a tres pacientes. No más”, dijo Leonardo Contreras en el audio.

«Lamentablemente, si la nueva redistribución conlleva el cierre de otras áreas, se cerrarán porque no se puede hacer más», sentenció el médico.

Durante la última supervisión nocturna realizada al Hospital Central, Contreras evidenció la presencia de solo 14 enfermeros y cinco camareras para atender a pacientes en 10 pisos.

“No hay personal. Esa es la realidad. El mandato ahora es atender a esta pobre gente. Se infectaron de covid-19 y se pueden morir”.

Sin garantías

El grupo de enfermeros asistentes a la reunión está dispuesto a entrar a área de aislamiento siempre y cuando se garanticen las medidas de protección y bioseguridad.

Han pedido en reiteradas ocasiones le sean aplicadas las pruebas de descarte para la covid-19, al menos cada tres días, al entrar y salir del área de aislamiento, pero no hay pruebas

“Exigimos que respeten la cantidad de pacientes a atender. En el área de cuidados críticos se había acordado cinco pacientes  y no se está respetando. Hay dos intensivistas nocturnos atendiendo a ocho pacientes. No queremos que esta situación de repita en el área de covid-19 porque el riesgo es mayor”, dijo Rosbely Castro, enfermera intensivista con tres años de servicio en el hospital de San Cristóbal.

Hasta la fecha, el centro de salud cuenta con solo 20 intensivistas capacitados para ingresar al área de covid-19. Sus preguntas se escuchaban en el audio: “¿Qué pasa si todos se contagian? ¿Quién atenderá a quienes vengan al hospital? No nos negamos a atender a los pacientes pero pedimos se cumplan nuestras exigencias que no son más que derechos…”.

La labor diaria la realizan los enfermeros por vocación “así suene romántico” pero no están dispuestos a cumplir «un papel de héroes porque nadie los va a revivir, ni a cuidar de ellos y sus familiares», precisó Rosbely Castro, como portavoz del grupo.

Hace más de cuatro meses se alertó de la situación que se podía enfrentar en el centro de salud y los llamados fueron en vano, resaltó otro de los profesionales de la salud.

El escaso conocimiento para enfrentar la covid-19, teniendo en cuenta que quienes han sido designados para el área de aislamiento (nueve enfermeros) apenas egresan de una institución educativa, es parte de la crisis en el centro hospitalario, señaló otro de los trabajadores.

“¿Es oportuno que le digan al personal de un viernes para un lunes: ´tiene que subir a la zona de aislamiento´», preguntó un enfermero.  La respuesta recibida por parte de la dirección fue: “En la guerra es así”.

No hay material

Hasta ahora, posiblemente, pudiera estar garantizado el material de bioseguridad para el primer frente que trabajará directamente con los pacientes con covid-19, según dijo el subdirector del hospital de San Cristóbal, Édgar Suárez, durante la reunión.

Suarez destacó que han enviado algunos insumos desde la Corporación de Salud pero “la última gandola que llegó traía muy poco, casi nada, de material de bioseguridad. No es suficiente para cubrir todas las necesidades del personal del hospital”, aseguró.

Ante esta crisis que atraviesa el único centro de asistencia pública del Táchira, diferentes organizaciones de la sociedad civil, gremios de empresarios y la alcaldía de San Cristóbal se han unido para realizar jornadas de recolección y donación de material de bioseguridad al personal.

“No es justo dejar desprotegidas las demás áreas. ¿Qué pasará entonces con el personal de las UCI pediátrica, neonatal o sala de partos? A las enfermeras se les están negando los tapabocas. Hemos tenido que hablar con los compañeros de cuidados críticos para que nos den un tapaboca desechable al que usamos tres días”, precisó una enfermera.

«En cuidados intensivos pediátricos las enfermeras han hecho procedimientos sin guantes. Esto conlleva riesgo para el paciente y para ellas mismas», vociferó uno de los asistentes.

En otro grupo de profesionales de la salud de ese hospital se señaló que el «silencio cómplice» de quienes aceptaron trabajar  en condiciones no adecuadas «los perjudicó a todos».