Los destilados Caribú participaron en 4 competencias internacionales, obteniendo 11 medallas. Para el año 2020 lanzarán rones con más tiempo de añejamiento
La marca de destilados Caribú cumple su primer año, acumulando once distinciones en los mercados internacionales.
Con un ron y tres destilados, estas bebidas son fabricadas por Bodegas Luedíaz, que suma 56 años de operaciones en el país. Cuenta con tres bodegas de envejecimiento y capacidad instalada para añejar dos millones de litros.
Frank Betancourt, director de Mercadeo de Caribú, visitó la sede de El Estímulo y Bienmesabe para introducir parte de la carta de cocteles que han desarrollado y hablar de los logros alcanzados por esta marca.
Un año de competencia
Actualmente, Caribú cuenta con un ron con dos años de envejecimiento, el Selection Solera, envejecido en barricas de roble francés y americano, y tres destilados hechos con método del ron, con un año de envejecimiento, Gold Superior, Spiced y Blanco.
«Caribú ha sido muy bien recibido, especialmente entre el público joven, que aprecian la relación calidad y precio», asegura Betancourt.
Los destilados Caribú más solicitados por este público son el Gold Superior y el Spiced, que conlleva una interesante mezcla de especias. Dice Betancourt que ya dominan el 10% del mercado de este segmento.
Las medallas
La marca ha obtenido once medallas en las competencias internacionales San Francisco World Spirits Competition, Miami Rum Renaissance Festival, International Wine & Spirit Competition (IWSC) en su 50 Aniversario y en el New York World Wine & Spirit Competition.
Entre los proyectos que asoman para 2020, se encuentra ampliar la distribución para llegar a todo el país, iniciar exportaciones, lanzar su propia carta de cocteles y, quizás lo más importante, presentar dos rones con mayor envejecimiento.
Las casas roneras que cuentan con la D.O.C. son Barrica, Bodega 1800, Bucare, Caballo Viejo, Calazan, Cañaveral, Carúpano, Diplomático, Estelar, Pampero, Ocumare, Quimera, Roble Viejo, Santa Teresa, Tepuy y Veroes
El tequila se ha refinado pasando del shot en la barra a la copa en el salón gracias a procesos más elaborados que resultan en destilados de gran calidad
