156 nuevos casos detectados y vamos rumbo a los 2.000

Hoy el vicepresidente de Comunicación, Jorge Rodríguez, dio el parte de los contagios de COVID-19 y al mismo tiempo hizo el intento de desnudar a la oposición: dos en uno. ¿Lo logró? Hay que esperar para ver si Juan Guaidó y su equipo atinan a dar una buena respuesta. Por lo pronto, lo que importa es esto: 156 nuevos casos detectados y se contabiliza, además, un venezolano muerto como consecuencia de la enfermedad.

Tras celebrar el modelo de desconfinamiento al que llaman 5×10 y felicitar a los sectores que se han sumado durante estos dos días, Rodríguez informó que había 6 nuevos casos diagnosticados durante las últimas 24 horas. Pero ese, como ya es costumbre, era un dato parcial: los «comunitarios».

Y para llegar al dato duro hizo una especie de introducción hablando de Colombia, Brasil y el resto de los países de la región que, según la narrativa oficial, han hecho todo mal: «Somos una isla de responsabilidad rodeada por el epicentro de la pandemia en Latinoamérica».

Lo que le faltaba por anunciar eran otros 150 nuevos casos detectados: 136 venezolanos provenientes de Colombia, 3 de Ecuador, 2 de Perú y 9 trabajadores de la salud contagiados durante el ejercicio de sus labores en las zonas fronterizas.

Eso, y la mala noticia de un nuevo fallecido: Rafael Rodríguez, de 73 años. Este señor presentaba un cuadro poco auspicioso: diabetes tipo II, insuficiencia renal, anemia y una enfermedad mental degenerativa, explicó el funcionario: el 21 de mayo dio positivo a la prueba rápida, el 22 su PCR confirmó el diagnóstico y murió hoy en un centro centinela.

El cuadro total del país queda así: 1.819 casos en total, 334 recuperados, 977 pacientes en hospitales, 475 en CDI, 15 en clínicas privadas y 18 muertes.

De los 1.467 casos activos se registran como asintomáticos 1.327, otros 135 presentan insuficiencia respiratoria aguda leve, 5 moderada y no hay pacientes en unidades de cuidados intensivos al día de hoy.

Reforzando la versión de los «importados», Rodríguez dijo que 53.789 venezolanos han retornado al país y entre ellos se han detectado 1.216 casos. «Se traen las curvas exponenciales de Colombia, de Brasil», deslizó.

Presentó a continuación lo que calificó como dos buenas noticias. Primero se ocupó el acuerdo firmado entre el gobierno de Maduro y el gobierno interino de Juan Guaidó con la Organización Panamericana de la Salud para gestionar y administrar ayuda humanitaria internacional para la lucha contra la pandemia.

Desde las filas de Guaidó ese convenio se presentó como una especie de triunfo porque habían logrado que «la dictadura» aceptara no manejar los fondos, pero no dieron a conocer el contenido exacto del convenio. Rodríguez lo presentó como un acuerdo que habían preferido manejar primero con discreción pero que en vista de lo hecho por la oposición habían decidido hacerlo público.

Mostró a los firmantes: el ministro de Salud Carlos Alvarado, y el doctor Julio Castro, como asesor de la Asamblea Nacional -«del G4», dijo- y «como garante» el representante de la OPS en Venezuela, Gerardo de Cosio.

Lo que leyó, en esencia, es una especie de carta de compromiso entre las dos partes para trabajar juntos en la procura de recursos internacionales y el desarrollo de metodologías y actividades para combatir el avance de la COVID-19.

«Lo único que podemos objetar de este acuerdo, es que llegó demasiado tarde», ironizó Rodríguez.

La otra buena noticia reservada para el final tiene que ver con la activación de una producción local por parte del Instituto Nacional de Higiene del llamado «Virocul», que es el vehículo o medio de transporte para las pruebas PCR.