Director del Centro de Estudios Políticos y de Gobierno de la Universidad Católica Andrés Bello, el analista cree que para las elecciones regionales del 21 de noviembre el gobierno intentará replicar una estrategia que ya le ha dado resultados en procesos anteriores.
Aunque analistas aseguran que el Acuerdo de Salvación Nacional ha tenido poca receptividad, sigue andando. Los temas para la negociación se discuten buscando puntos intermedios pero hay quienes aseguran que la posición del gobierno sigue siendo dividir aún más a una oposición que cada vez luce más fragmentada de cara a las elecciones regionales de noviembre.
Uno de ellos es el abogado benigno Alarcón (@benalarcon), Director del Centro de Estudios Políticos y de Gobierno de la Universidad Católica Andrés Bello. El analista cree que el gobierno intentará aplicar en estas elecciones regionales una estrategia que ya le ha dado resultados en procesos electorales anteriores.
“No veo diferencias con las elecciones del 6 de diciembre. A parte del nombramiento de nuevos rectores, que fue producto de una negociación con la mesa de diálogo nacional y Capriles, el gobierno lo hizo para asegurar tenerlos en las elecciones”.
Alarcón continuó explicando que “las garantías duras no se han dado todavía. La intención del gobierno es mantener una estrategia similar a la que le dio buenos resultados en elecciones en el pasado y es tratar de sustituir a la oposición por las oposiciones. Tener varias oposiciones que sean minoritarias y que no sean unitarias. Dispersar el voto dejando estados y municipios en sus manos como pasó con los curules de la Asamblea Nacional”.
Para benigno Alarcón, hasta el momento no hay nada que le haga pensar que este diálogo sea diferente a otros. Pero prefiere ver el vaso medio lleno apostando a que se puedan conseguir herramientas para destrabar la crisis.
“Es una ventaja que se mantenga la mediación noruega. También que se tenga el apalancamiento de la comunidad internacional para utilizar las sanciones como mecanismo de presión, único que tiene la oposición hasta el momento. Pero hemos visto voceros oficiales, como el señor Maduro, y pareciera que no hay mayor voluntad en avanzar hacia un proceso de mediación que se traduzca en una salida a la crisis política”.
Alarcón analiza que “el gobierno quiere la suspensión de las sanciones, como siempre ha querido, la oposición una salida a la crisis mediante un cambio; ahí está la enorme dificultad. Por eso veo saludable la visita de Gerardo Blyde a Estados Unidos y creo que otros países, para discutir la forma de usar las sanciones como punto de apalancamiento”.
El analista dijo que para que la negociación de resultados debe ser integrativa. “Que no busque bajar las tensiones dejando cosas importantes por fuera. El gobierno quiere negociar las sanciones y buscar legitimación, del otro lado no pueden ser blandos ni negociar cosas que no nos sirvan para nada”.
Uno de los puntos que Benigno Alarcón cree que debería negociarse es el referéndum revocatorio.
“Es interesante y hay que verlo con cuidado. Debe ser un punto a tratar así como lo fue en 2002, que tenga observación internacional desde la recolección de firmas hasta la votación. Sé que para el gobierno será difícil aceptar, pero la oposición debería considerar hacer intercambios significativos por el revocatorio, para que se genere el dilema en el gobierno y puedan aceptar a arriesgarse a medirse”.
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